Ya era tarde, así que, volvimos al hotel. Carlos y yo subimos a la habitación,y Andrea y Dani se fueron a dar un paseo, ya querría yo tener la suerte de Andrea y, poder salir con mi ídolo. Entramos, Carlos me agarró la muñeca y me llevó hasta una silla.
-Espera aquí, y,no te muevas-Me dijo antes de salir de la habitación.
-Vale...-Dije confundida.
*Narra Andrea*
Dani y yo no entramos al hotel, en cambio, fuimos a dar un paseo. Todo era perfecto, pero había una cosa que no tenía clara del todo.
-Eh... Dani.
-Dime.
-Tengo que hablar contigo-Fui al grano.
-Vale, espera que ahora llegamos.
-¿A dónde?.
-Te quedas con la intriga.
Estuvimos unos minutos caminando, yo quería hablar con el, aclararlo todo.
Yo seguía a Dani callada, absorta en mis pensamientos.
-Andrea, hemos llegado-Dijo Dani, apartandose para que pudiera ver donde estabamos.
Era un parque hermoso, con un banco de piedra, y una mesa con un mantel blanco y una vela encima y... ¡Helado!.
-¡Wow!, es... es precioso.
-Sabía que te gustaría.
Nos sentamos en el banco, entonces supe que era el momento para aclarar aquello con lo que me estaba comiendo la cabeza.
-Dani... ¿podemos hablar, ya?
-Claro, te escucho.
-Te acuerdas de... lo de esta mañana, ¿verdad?
-Sí, por eso te he traído aquí, necesito decirte algo...
-Y yo también, quiero decirte una cosa.
-Bueno... Andrea... Lo que hablamos esta mañana, lo hemos dejado a medias.
-Exacto.
-Pues quería decirte que... que es verdad lo que te he dicho, estoy enamorado de tí.
-Dani, yo... yo también estoy enamorada de tí-Dije un poco avergonzada, como iba a decirle yo a mi ídolo, que, estoy enamorada de él.
-Andrea,¿quieres ser mi novia?-Dijo Dani con una rosa entre las manos, ains pero que chico más... me he quedado sin palabras.
-Dani,claro que... que quiero ser tu novia-Dije con una sonrísa.
Me tendió la rosa y yo la acepté, después, me abrazó. Estuvimos un rato abrazados, luego le miré a los ojos, ojazos azules, la perfeción en persona. Él se acercó a mí, y yo a él, y nos besamos. Fue una noche mágica, la mejor de mi vida.
Yo esperaba ahí, sentada en la silla, no tenía ni idea de lo que este chico pretendía, de repente sentí cómo alguien me tapó los ojos por atrás.
-Te quiero.- Era Carlos, jo, es tan perfecto...
-¿Para eso me haces esperar aquí sentada bobo? Bueno, igualmente te quiero.
-No, espera.- Cogió una guitarra y se sentó con una silla en gente de mí, empezó a tocar "me gusta", y me la cantó. Yo no sabía qué cara poner, pero por dentro mi corazón iba a cien, sentía mariposas en el estómago, me enamora. Cuando terminó de cantar
-Pf Carlos...-Me interrumpió
-¿Qué te pasa? ¿No te ha gustado?
-¿Qué? ¡No! Tonto, todo lo contrario, me ha encantado, ¿te han dicho alguna vez que eres perfecto? Te quiero y...- Se acercó muchísimo a mí, me quedé callada por que no sabía qué hacer, me quedé embelesada con sus ojos, rozó sus labios con los míos y me besó.
-Te amo.- Dijo Carlos.
-Y yo a ti.
-¿Quieres que vayamos de compras?- Me sonrió.
-¿De compras? Sabes lo que les gusta a las chicas eh.- Sonreí.
-Sé lo que te gusta a ti.- Me guiñó el ojo. Y yo reí.
-Vale, pues voy a cambiarme.
-¿Para qué? sí estás guapa hasta en pijama.
-Ay ¿cómo no te voy a querer? Si es que eres un amor.
-Lo aprendí de ti, anda, cámbiate rápido que nos cierran.
-Jaja, vale, ya voy ya voy.
Terminé de cambiarme y nos fuimos.
Íbamos hablando por el camino, nos hicimos algunas fotos, y entramos en primark, me gustó muchísimo una camiseta que vi, la cogí y le dije a Carlos que me la iba a probar, él se quedó esperándome fuera del probador, salí y dije
-¿qué? ¿Qué tal me queda?
-Wow, estás preciosa, como siempre, te he traído una cosa para que te la pruebes...
-Aww, gracias, pero para precioso ya estás tú. ¿ah sí? A ver a ver...- Me había traído un vestido precioso, me lo probé.
-¿Qué tal me queda el vestido elegido por ti?- Le guiñé un ojo.
-Estás muy sexy.- Se acercó a mí y me besó.
-Ay, venga tonti, ya tendremos tiempo de besarnos, voy a pagar esto.- Entré de nuevo al probador a ponerme mi ropa y luego fuimos a la caja.
La dependienta dijo lo que valía (En inglés, por supuesto) Iba a darle el dinero pero Carlos preguntó:
-¿Se puede pagar con tarjeta?
-No, Carlos, yo no tengo tarjeta de crédito...
-Pero yo sí.- Sonrió. Carlos pagó y nos fuimos del centro comercial.
-Carlos, no tenías que haber pagado, yo no soy de ese tipo de chicas...
-Pero a mí me gusta regalarte cosas, por que te quiero.
-Eres el mejor.- Sonreí.
-Y tú la mejor, te amo.
Íbamos de camino al hotel y nos encontramos con Dani y Andrea.
-¡Daaaaani!- Gritó Carlos.
-¡Caaarlos!- Gritó Dani.
-Andrea, ¿Qué tal con Danielo?- Le dije.
-Genial, ¿y tú con Charlie?- Me contestó.
-Genial también, me ha comprado un vestido y una camiseta, es un amor.
-Ooh qué cuqui, Dani y yo hemos compartido algodón de azúcar.-Rió.
Llegamos al hotel y nos fuimos a dormir.
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